viernes, 11 de abril de 2008

La verdad de la milanesa

Creo que ya hemos dicho anteriormente en este sitio que una de las actividades preferidas del Gordo Morcilla es comer. Pensando en eso es que se nos ocurrió una idea:


Gordo Morcilla Ediciones ¡¡¡ presentaaaaaa!!!

La verdad de la milanesa, secretos gastronómicos.

En este volumen, ¿cuál?, éste, usted encontrará todas aquellas verdades escondidas, trucos culinarios, anécdotas gastronómicas y muchas cosas más sobre su plato preferido.

Dentro de la gastronomía, como en todas las artes, existen muchos secretos. Las recetas son en cierta forma como los trucos de magia, podés llegar a leer un libro donde te diga como se hacen pero siempre les falta el ingrediente especial que los hace únicos.

Aprender a cocinar es algo tan esencial como aprender a leer y a escribir. Uno nunca sabe si en un futuro no necesitará valerse de sí mismo para alimentarse. O si naufragará en una isla inhabitada por seres humanos (Aclaración: si piensa naufragar nunca se olvide de su encendedor de bolsillo, no querrá que le pase como a Tom Hanks que tuvo que hacer fuego frotando los palitos)

Otra de las particularidades de la cocina es nuestra ignorancia ante lo que lleva el producto que acercamos a nuestras bocas. Un ejemplo claro de ésto es el fiambre conocido como queso de chancho (en otros países, cerdo, cochinillo, lechón), que según los entendidos está hecho con todo lo que no se aprovecha del animal (en realidad se aprovecha para ésto): grasa, patas, ojos, pestañas, uñas y alas; todo eso condimentado.

Pero lo más importante de todo, aquello que deben tener muy en cuenta, lo indispensable, el secreto mejor guardado, el "ingrediente clave" (por usar términos gastronómicos) es nunca olvidar: "el número de teléfono de la rotisería de la esquina".

PD: Pintar el entrecomillado para saber el secreto mejor guardado de la gastronomía.

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